“TODO POR AMOR, NADA POR LA FUERZA”

Es el año 1930. Sobre seis esteras tiradas en el centro del parque La mar, hoy Parque de las aguas, las profesoras Emilia y Victoria Barcia Boniffatti, acompañadas de algunas madres, dictan clases, por primera vez, a trece niños menores de 5 años en Lima. Es el inicio de la educación inicial en la capital peruana.

Un año después, el 25 de mayo, las hermanas Barcia Boniffatti inauguran, con el lema “Todo por amor, nada por la fuerza”, el primer jardín de infancia estatal del Perú.

EDUCACIÓN PRESCOLAR EN LIMA

Sebastián despierta sin ser llamado a las 6.30 de la mañana, es lunes y sabe que tiene que ir al colegio. Cuando iniciaron sus clases, en marzo de este año él tenía dos años y tres meses. Al igual que él, en Lima 86 de cada 100 niños de 0 a 5 años, acceden a la Educación Inicial, según la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (DRELM).

El Ministerio de educación (MINEDU) planea que al 2021 el 90% de niños de 3 a 5 años de edad asistan a escuelas de nivel inicial en el Perú.

IMPORTANCIA DE LA EDUCACIÓN PREESCOLAR

El rojo y el verde son los colores preferidos de Sebastián y contar, del uno al diez, es su deporte favorito. En el último trimestre aprendió, también, a saludar y a despedir.

“Los primeros años de vida son los momentos en que el cerebro se desarrolla vertiginosamente y se construyen las conexiones sinápticas, responsables de todo el funcionamiento orgánico, mental y emocional. Asegura, Helena Valdivieso, docente del departamento de educación inicial de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP). “He ahí la importancia de la educación en los primeros años de vida”, agrega.