¿Realmente estamos informando con veracidad?
A diario, miles de peruanos acuden a los kioskos más cercanos de sus casas para comprar los diarios de su preferencia y así mantenerse informados de lo que acontece en nuestro país. Pero, cuando una persona llega al kiosko de periódicos, lo primero que va a ver es la portada de los diarios; imagen, titular, volada y bajada se apreciará a primera vista del lector. Es ahí donde ‘ataca’ el periodismo escrito, las portadas seductoras de los diarios son el pan de cada día para generar mayor venta de este. ¿Y la información dónde queda?Es cierto que los diarios quieren vender los mayores tirajes posibles todos los días y por ello, olvidan que lo más importante y lo que el público realmente merece, es la información veraz.Poco a poco, los medios impresos van perdiendo esa credibilidad mediante sus portadas e informaciones sesgadas. Los tiempos han cambiado, ahora sus prioridades son otras, la competencia ha ido en aumento y con ello las necesidades de vender también. Un claro ejemplo es el diario deportivo Líbero que pertenece al Grupo La República, su primera edición fue a finales de abril del año 1995, y con 22 años en los diferentes puestos de periódicos, es uno de los diarios deportivos más importantes y vendidos del país junto a Depor, Todo Sports y Bocón. Pero, así como es un diario muy vendido, es también muy sensacionalista.
Esta es la portada del 31 de marzo del 2017 del diario deportivo Líbero. Claramente, se puede observar que la imagen es un tanto tendenciosa ya que si analizamos la foto en la que aparece el futbolista Jefferson Farfán, sale con una botella en la mano, en la cual a primera vista parece una botella de cerveza y da a entender que el jugador peruano es un irresponsable, borracho y que no debería jugar más por la selección peruana. Esta portada de marzo de este año se da en la coyuntura de las eliminatorias en la que finalmente Perú clasificó al mundial después de 36 años jugando el repechaje ante Nueva Zelanda, en aquella ocasión aún ni pensábamos que llegaríamos a estas instancias del quinto puesto de la tabla de posiciones. Corría la fecha 14 y enfrentamos a Uruguay donde conseguimos un triunfazo por 2-1 para ilusionarnos cada vez más con llegar a la copa del mundo, cinco días atrás empatamos ante Venezuela en la ciudad de Maturín y la victoria sobre Uruguay nos dio fortaleza para enfrentar lo que vino luego que ya es historia conocida. En ese partido ante Uruguay por la fecha 14 de las eliminatorias sudamericanas, Paolo Guerrero recibió tarjeta amarilla, eso le impedía jugar ante Bolivia en agosto en el Estadio Monumental de Ate y surgía la novela de la prensa sobre quién debería reemplazar al goleador peruano Paolo Guerrero.Jefferson Farfán venía de una lesión y poca continuidad de partidos, no merecía estar en la selección peruana y él lo sabía. El diario Líbero sacó su portada tres días después del triunfo ante los ‘charrúas’ con esta imagen de Jefferson Farfán con la botella en la mano, la mirada perdida y el titular que decía “No llamen a Farfán”. La portada generó controversias en las redes sociales, surgieron comentarios a favor y en contra del diario. Sin duda el sensacionalismo de aquella portada vendió. El diario Líbero se caracteriza por esos tipos de portadas, imágenes, titulares, etc, intentan dar su punto de vista y sesgar la información al lector. Eso evita que se le dé la información imparcial que el público debería obtener de los diarios. Siendo el diario Líbero uno de los más venddos en cuanto al deporte junto con Depor y Bocón, también es considerado un diario para el nivel socioeconómico C y D. El periódico está dirigido hacia un público en su mayoría masculino y cuyas edades oscilan entre los 13 y 35 años aproximadamente. La esencia de los titulares de Líbero está en su estilo coloquial. Muchas veces el uso del doble sentido va de la mano con alguna fotografía pícara. En otras se apela al sentido del humor del lector. Según las cigras de la Sociedad de Empresas Periodística del Perú (Sepp) Depor abarca el 41% del total de consumo, Líbero el 36% y El Bocón un 22%. El restante 1% lo posee Todo Sport, un diario que viene circulando desde hace 20 años pero que está a punto de desaparecer por la baja de las ventas que obtiene en los últimos años. Cuando se le consultó a los lectores en los kioskos de la avenida Nicolás de Piérola sobre qué era lo que le llamaba más la atención a la hora de comprar un diario respondieron que la portada y el titular que trata de llamar la atención del lector “Siempre me fijo en lo que dice en la portada y tmabién el titular, a veces cuando sale una noticia fuerte y los diarios impactan con sus titulares, me llama la atención y lo compro”, dijo Honorio Salas. Otros, como el caso de Luis Rojas, ya tienen su diario favorito y pese a que otros diarios intenten ganar público con sus llamativas portadas, estos son fieles a sus diarios de preferencia. “Siempre compro Depor porque me gusta sus titulares y porque tiene un lenguaje sencillo y futbolero. Depor es de barrio como yo ja ja ja”, mencionó Luis Rojas con una sonrisa expresiva. Como vemos, los diarios deportivos se caracterizan por la manera en que informan mediante la portada, imagen y titular. La prioridad de los diarios es vender y con tal de alcanzar ese afán de ventas lo más que puedan, pierden el sentido de la información que es lo que debería primar en los medios escritos porque al fin y al cabo los lectores son los que deciden qué diario comprar, qué diario les informa bien, qué diarios mienten o exageran en sus informaciones, etc. Finalmente, somos nosotros mismos como periodistas saber qué vendemos al público, nuestra labor es brindar información veraz y de calidad. Ellos (lectores) sacarán sus propias conclusiones sobre lo que están consumiendo.