Plomo en la sangre
Rogelio yace recostado sobre su cama mientras mira televisión. No saldrá a jugar hoy, tampoco mañana. El objeto más próximo a él es un rollo de papel higiénico que usa para limpiar su nariz ensangrentada. Rogelio forma parte de 500 niños que presentan altos niveles de plomo en la sangre.
“A mi hijo le comenzaron a doler mucho las piernas y me dijeron que es efecto del plomo porque les descalcifica los huesos. Todos estamos preocupados por nuestros niños. Mi hijo tiene un nivel 12.4 de plomo en la sangre y mi hija de 1 año y 8 meses también supera el nivel estándar de 10 microgramos”, declaró Marlene Rosas Meléndez, vecina del asentamiento humano Virgen de Guadalupe y madre de Rogelio.
Los padres de familia del distrito recientemente creado “Mi Perú”, en el Callao, denunciaron que sus hijos no pueden dormir, sufren de pérdida de concentración y apetito, anemia, dolores de cabeza y retraso en su crecimiento debido a que su sangre contiene altos niveles de plomo.
La contaminación ambiental es producida por el humo que expulsan las chimeneas de las diversas empresas dedicadas a la fundición de plomo que operan cerca al asentamiento humano Virgen de Guadalupe. Hay 67 empresas que de las cuales se corroboró que tres de ellas afectan a los asentamientos humanos colindantes, según la Comisión de Lucha contra la Contaminación en Mi Perú.
Luis Amaya Pingo, integrante de la Comisión de Lucha Contra la Contaminación Ambiental, lamentó que la poca intervención de las autoridades competentes haya originado un gran malestar entre los vecinos, siendo las madres gestantes, los niños y las personas de la tercera edad los más afectados con esta contaminación.
“Este problema data de muchos años atrás, hemos presentado denuncias ante el Ministerio del Ambiente y el Ministerio de la Producción. Tenemos más de un año atrapados en la asfixiante burocracia que impide la toma de medidas concretas”, finalizó Amaya.
AVANCES
El fiscal especializado en materia ambiental, Arial Tapia Gómez, expresó que el 2 de febrero la fiscalía logró que se condene al dueño de FUNDECO, una de las empresas contaminantes, a 3 años de pena privativa de la libertad y también se abrió una investigación preliminar a METAL SAC debido a que su chimenea no calificaba técnicamente.
Tapia Gómez manifestó que es necesario exigir al Congreso de la República que se establezcan límites máximos permisibles en materia de plomo porque el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental – OEFA y Produce tienen las manos atadas para sancionar. “Es por ello que existen muchas sentencias absolutorias de empresarios que trabajan con plomo”, dijo.
“Estamos trabajando con estándares en materia ambiental que solo sirven para hacer políticas, pero necesitamos límites máximos permisibles en plomo, así como modificar la Carta Magna en materia ambiental”, recalcó.
“VIDA SÍ, PLOMO NO”
Durante el mes de setiembre los vecinos de Mi Perú realizaron una serie de marchas contra contaminación por metales pesados.
Entre arengas de “Es un crimen envenenar”, “Vida Sí, Plomo No” y “PPK come lomo y el pueblo come plomo”, los manifestantes demandaron que se declare en emergencia ambiental a Mi Perú y Ventanilla.
La protesta dio resultado. El 20 de octubre, el Ministerio del Ambiente declaró en Emergencia Ambiental la Zona Industrial y el I.E.P Arturo Padilla Espinoza del distrito de Ventanilla, así como la zona urbana del distrito de Mi Perú.
Marlene, la madre de Rogelio, considera que la medida es insuficiente. “Hasta ahora solo le han hecho más pruebas de sangre y nada más, las fábricas siguen operando”. Acomoda a su hijo sobre el sillón y abre un cuaderno, Rogelio tiene un examen de recuperación. Uno de los efectos de la contaminación por plomo es la falta de concentración.